El Manchester City de Guardiola no levanta cabeza: pierde una ventaja de 3-0 en apenas 15 minutos
Sigue la mala racha del Manchester City de Pep Guardiola, que a sus cinco derrotas consecutivas suma ahora el empate ante el Feyenoord tras desperdiciar una ventaja de 3-0 en su regreso a la Champions League: apenas 15 minutos le bastaron al conjunto neerlandés para igualar el marcador y rascar un punto.
Ya ni con un 3-0 pueden estar tranquilos en Mánchester. Esta frase, que hasta hace unas semanas siempre se hubiera atribuido al United, ha cruzado ahora de acera en la ciudad inglesa y apunta directamente a un City que dominaba plácidamente al Feyenoord y que regaló el empate en el tramo final.
Por increíble que parezca, el cuadro citizen no solo no ganó el partido más sencillo para salir de su crisis de cinco derrotas seguidas, sino que regaló una de las remontadas más increíbles que ha visto nunca el Etihad Stadium a un Feyenoord que, con 3-0 en contra, lo veía todo perdido.
El doblete de Erling Haaland, primero de penalti y más tarde cazando un centro de Matheus Nunes, y el tanto de Ilkay Gündogan, con ayuda de un defensa que desvió la pelota, era un argumento más que suficiente para pensar que el City, con este resultado, tenía el partido ganado en el 75′.
Pero Josko Gvardiol, que acostumbra a tapar sus errores defensivos y su tibieza atrás con golazos, volvió a pecar de ingenuo como el fin de semana ante el Tottenham Hotspur. En una cesión de juvenil, le entregó en bandeja el 3-1 a Anis Hadj Moussa, que batió a Ederson y comenzó un runrún en el Etihad.
Guardiola se encogía en el banquillo y se echaba las manos a la cabeza. Exagerado, pensarían muchos, viendo que la renta aún era de dos goles y que el otro equipo no era el Real Madrid de la 2021/2022, sino el Feyenoord, pero quizás el técnico español había tenido una visión de que aquel error era solo el comienzo de un descalabro monumental.
Siete minutos después, en el 82, un centro al segundo palo pilló a Gvardiol desprevenido, porque otra vez el City se había dormido. El croata tenía que cubrir a dos jugadores, no llegó al centro y Jordan Lotomba tocó la pelota con la máxima precisión posible. El cuero entró entre el palo y Ederson y le quedó a Santiago Giménez para que el mexicano volviera a los terrenos de juego tras dos meses lesionado con gol.
Con ocho minutos más de añadido, el Feyenoord estaba a un gol de ampliar la crisis. Y cuando las cosas van mal, muchas veces solo pueden ir a peor. En un pase en largo, Igor Paixao ganó por alto a un Ederson que salió a por uvas y puso un centro al área para que, sin oposición, David Hancko rematara el surrealista 3-3.
Jack Grealish pudo apagar el incendio con un tiro al larguero en el descuento, pero no, el City suma seis partidos sin marcar y, además de haber podido perder ya la Premier, también se complica la Champions: los sky blues son decimoquintos, con ocho puntos y solo tres partidos más por delante.